"AMIGOS DEL CINE Y TEATRO EN EL AGORA" REFLEXIONA SOBRE EL AFORO DE 800 PLAZAS DEL PROYECTO DEL CINE-TEATRO EN EL PACHI TORRE

 


 Referente a la supuesta construcción del teatro-cine en el Pachi Torre, hay una pregunta cuyo planteamiento consideramos interesante: ¿En base a qué datos o estudios se plantea un aforo de 800 localidades para esa construcción?


Hace algunos días hicimos público un estudio sobre costos de construcción de teatros. En esta ocasión queremos hacer público un estudio sobre la capacidad de los cines que hay actualmente en algunas ciudades próximas. En una próxima entrega hablaremos de las actividades teatrales.


Así, revisando nuestro entorno geográfico más próximo(Santander, Bilbao, Torrelavega, Oviedo), vemos que en Santander en los últimos años han cerrado más de diez cines, quedando en pie solamente uno con capacidad para 327 espectadores y dos mini cines, además de la filmoteca; en Bilbao hay constancia de que han cerrado del orden de 25 locales “de los de antes”; en Torrelavega llegaron a coexistir cuatro grandes salas de proyección, hoy día solo
hay una sala de proyección en la casa de Cultura, con un aforo de 120 espectadores. En Oviedo solo queda un local con proyecciones esporádicas.


A nadie se le oculta, y mucho menos si vive en Castro Urdiales, que los locales de gran aforo han desaparecido de las ciudades, sea cual sea el tamaño de éstas. Generalmente bajo tres causas principales: urbanísticas, cambio de costumbres sociales y el acceso al automóvil; de manera que los grandes locales – generalmente privados – al perder rentabilidad o se han convertido en cines de pequeño aforo o han desaparecido y en su lugar han crecido
los multicines de pequeño tamaño, generalmente asociados a grandes superficies comerciales.


Es muy difícil determinar el aforo de un cine sin datos previos de asistencia, por lo tanto, si se toma una decisión sin
un estudio básico previo, el riesgo de error es elevado. El único dato que nosotros podemos aportar es la asistencia a las sesiones de cine en el Instituto Ataúlfo Argenta: desde enero de 2020 hasta el confinamiento de marzo hemos contabilizado 689 espectadores en 13 sesiones, lo que supone una media por sesión de 53 espectadores.


Supongamos que en Castro Urdiales esa tasa de asistencia se cuatriplica, alcanzando 212 espectadores en alguna sesión.

¿Alguien se imagina la sensación de estar 212 espectadores en una sala con capacidad para 800?


A la luz de estos números surge la pregunta: ¿Es coherente una inversión en un teatro-cine con capacidad para 800
localidades, cuando, la asistencia teórica media a las sesiones de cine puede ser de 53 personas?


Desde el punto de vista de su uso para proyecciones cinematográficas, quizá se debiera reflexionar en el sentido de
plantear la construcción de un teatro-cine con criterios prácticos y realistas: aforo adecuado a las costumbres sociales, que permita la flexibilidad de horario y calendario requeridos por los ciudadanos, que cubra las necesidades culturales reales y que no sea un dispendio económico que sobrepase innecesariamente nuestras posibilidades.


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