CASTROVERDE CONSIDERA "INACEPATABLE" LA PRESIÓN QUE BANKIA ESTÁ EJERCIENDO CONTRA LOS PREFERENTISTAS QUE PROTESTAN ANTE SU SUCURSAL CASTREÑA

Castro Urdiales, 26 de marzo de 2014

CastroVerde quiere criticar públicamente “la presión” que Bankia está ejerciendo contra el grupo de afectados por las participaciones preferentes que está protestando desde hace más de 50 días en la sucursalcastreña de esta entidad financiera. “No entendemos que, ante reclamaciones totalmente legítimas, se opte por el acoso a estas personas y no por abrir una puerta a la negociación, que es lo que piden”, apuntan desde CV. La tensión es creciente y está llegando en estos días a “límites intolerables”.

El colectivo se concentra todas las mañanas, de 10 a 13 horas, frente a la oficina de la avenida de la Constitución, para lo cual cuentan con un permiso de la Delegación de Gobierno. También pasan mucho tiempo dentro de la sucursal, donde desarrollan la acción de protesta del céntimo solidario, que consiste en
hacer muchas y pequeñas operaciones en favor de ONGs y entidades sociales con el fin de llamar la atención de la entidad y sus clientes sobre su situación.

Frente a una protesta legítima y pacífica de ciudadanos que solo pretenden recuperar su dinero, Bankia reaccionó poniendo un vigilante de seguridad en la oficina, con el que los miembros de la plataforma reconocen no haber tenido problemas. No obstante, es una más de las “medidas intimidatorias” que CastroVerde critica, como lo es hacer fotos de los afectados cuando colocan los carteles y pancartas para protestar o llamar a la Guardia Civil para identificar a estas personas. CV reclama a Bankia, “una entidad
rescatada con dinero público, que abandone esta actitud y adopte una postura más dialogante”.

También se han utilizado otros métodos para intentar coaccionar a los afectados, retirando las sillas en las
que se sentaban las personas más mayores y subiendo el termostato hasta 35-40 grados. Bankia no permite que se hagan fotografías dentro de la oficina, aunque sus empleados sí han hecho fotos a los afectados.

En los últimos días, la tensión ha aumentado y los empleados de la entidad financiera han llamado en varias
ocasiones a la Guardia Civil para identificar a los concentrados, seguramente con la intención de denunciarles, “criminalizando unas acciones cuya única intención es reclamar justicia”, denuncian desde CastroVerde.

Esta es la crónica de los hechos, según sus protagonistas:

. A mediados de enero, la plataforma de estafados por las preferentes de Castro decide en asamblea intensificar sus protestas contra Bankia.

. Comienzan las concentraciones, que pronto se convierten en diarias.

. En los primeros días, los afectados se quejan de que la entidad ha subido la temperatura de la calefacción en la sucursal para incomodar.

. Bankia pone a un vigilante de seguridad dentro de la oficina.

. Tras amenazar con ello, se retiran las sillas en las que se sentaban las personas mayores, de modo que todos los afectados tienen que protestar de pie. Según los afectados, un empleado de Bankia dice “para que se jodan” en referencia a ellos. Tampoco les permiten introducir en la oficina sus propias sillas.

. Algunos afectados se sientan en el suelo y otro coge una silla de un despacho, ante lo cual el director de la sucursal llama a la Guardia Civil. Los agentes le dicen que no pueden prohibir a una persona sentarse en una silla. No obstante, a día de hoy sigue sin haber sillas a disposición de los afectados. A las personas que se
enfrentaron se les prohibe volver a entrar en la sucursal de por vida.

. También denuncian que hay un intento por enfrentar a los afectados con los clientes de la entidad, obligándoles a hacer cola tras ellos.

. Los empleados de Bankia comienzan a sacar fotografías y vídeos a los afectados mientras estos colocan los carteles de protesta. Tras eso llaman de nuevo a la Guardia Civil para que identifique a los que se están manifestando, seguramente con la intención de denunciarles por ello (según comentaron los agentes).

. Los afectados por las preferentes se están planteando realizar una acampada frente a la oficina de Bankia, tal y como hicieron el año pasado frente a la de Caja Cantabria/Liberbank y que duró 29 días, con sus noches.